Decretos

 

 

Decreto establecido desde el Monte de Sión

 

Considerando que, por el sacrificio puro y santo una sola vez y para siempre del Cordero inmolado, pedimos entrar al trono de la gracia ante Jesús el mediador de un nuevo pacto y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel.


POR LO TANTO

Decretamos unánimes:

 
¡Ay de los que dictan leyes injustas y prescriben tiranía para apartar del juicio y para quitar el derecho a los afligidos de mi pueblo; para despojar a las viudas y robar a los huérfanos!

¿Y qué haréis en el día del castigo? ¿A quién os acogeréis para que os ayude cuando venga de lejos el asolamiento? ¿En dónde dejaréis vuestra gloria?

Denunciamos ante el trono del altísimo las leyes inconstitucionales como de la hoja de coca, leyes en contra de la familia, leyes que promueven abortos, matrimonio entre el mismo sexo porque se levantan en contra del diseño de Dios para esta nación.


Nos oponemos a todo sistema de violencia, menosprecio en contra de mujeres y niños y pedimos al Espíritu Santo derramar temor de Dios y convicción de juicio y de pecado para volvernos de nuestros caminos de maldad.

Cerramos las puertas de nuestra ciudad declarando que ninguna imagen de Asera será entronada, derribamos sus altares y se frustran los planes. Porque escrito está que Jehová, que hace todo, que extiende solo los cielos, que extiende la tierra por si mismo, que deshace las señales de los adivinos, y enloquece a los agoreros; que hace volver atrás a los sabios y desvanece su sabiduría, que dice a las profundidades: secas y tus ríos haré secar.

Tomamos autoridad sobre los vientos, las aguas y el fuego y declaramos que se sujetan a la voz de José les ponemos límites y atamos al destructor.

 

Finalmente declaramos Isaías 12: 1-6

 

En aquel día dirás: Cantaré a ti oh Jehová; pues aunque te enojaste contra mi, tu

indignación se apartó y me has consolado.

He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi

canción es Jehová quien ha sido salvación para mi.

Sacaréis con gozo aguas de las fuentes de la salvación.

Y diréis en aquel día, cantad a Jehová, aclamad su nombre, haced célebres en los

pueblos sus obras, recordad que su nombre es engrandecido.

Cantad salmos a Jehová, por que ha hecho cosas magníficas, sea sabido esto por

toda la tierra.

Regocíjate y canta oh moradora de Sión; porque grande es en medio de ti el Santo

de Israel

 

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