RESOLUCIÓN A FAVOR DE ISRAEL
La Paz, Bolivia 14 de mayo 2018
Bolivia se presenta a favor de Israel
Nos presentamos delante de Dios primeramente en arrepentimiento y pedimos perdón como habitantes de Bolivia:
- Por la ignorancia de los gobernantes y las palabras ligeras que dirigen hacia Israel sin entendimiento del peso del pacto de Dios con Abraham y esa nación “Bendeciré a los que te bendigan, y al que te maldiga, maldeciré...." (Génesis 12:3).
- Por ponernos en posición de condenar y buscar el castigo internacional de Israel.
- Por las alianzas con naciones enemigas de Israel, principalmente con Irán.
- Por poner restricciones (visa) de ingreso a nuestro país a los ciudadanos Israelíes, cuando antes era libre el ingreso. Nos arrepentimos y pedimos que el Señor tenga misericordia de nosotros para que no caiga sobre Bolivia las maldiciones que vienen como consecuencia de hablar mal de Israel.
En este día 14 del quinto mes del año de la buena voluntad del Señor:
La casa de José, rama fecunda, de la nación del aceite fresco y del trigo abundante, de las fuentes de agua viva que brotan del cielo, en acuerdo con el Espíritu Santo levantamos esta resolución mediante la cual:
- Desconocemos las palabras hostiles en contra de heretz Israel de parte de Evo Morales Ayma que en más de una oportunidad encaminó una votación en contra de Israel.
- Cancelamos palabras de maldición que ataron a Bolivia para frenar las corrientes de la reforma.
- Que en los 70 años de edad que marca una generación bendecimos a la nación de Israel, la reconocemos en el contexto de las naciones que están inscritas en el libro de la vida.
- Como iglesia de la nación levantamos nuestra voz para bendecir Israel, reconocerla como la nación que Dios escogió para sí y que en medio de ella hizo grandes proezas.
"Porque así dice el Señor: Gritad con alegría por Jacob, y dad voces por la primera
de las naciones; proclamad, dad alabanza, y decid: “Oh Señor, salva a tu pueblo, al
remanente de Israel.” He aquí, yo los traigo del país del norte, y los reuniré de los
confines de la tierra, entre ellos los ciegos y los cojos, la mujer encinta y también
la que está dando a luz; una gran compañía volverá acá. Con llanto vendrán, y
entre súplicas los guiaré; los haré andar junto a arroyos de aguas, por camino
derecho en el cual no tropezarán; porque soy un padre para Israel, y Efraín es mi primogénito.
Oíd, naciones, la palabra del Señor, anunciad en las costas lejanas, y decid: El
que dispersó a Israel lo reunirá, y lo guardará como un pastor a su rebaño. Porque el
Señor ha rescatado a Jacob, y lo ha redimido de manos más fuertes que él. Vendrán
y gritarán de júbilo en lo alto de Sion, y radiarán de gozo por la bondad del Señor:
por el grano, por el vino y por el aceite, y por las crías de las ovejas y de las vacas.
Su alma será como huerto regado, y nunca más languidecerán.
Entonces la virgen se alegrará en la danza, y los jóvenes y los ancianos a una;
cambiaré su duelo en gozo, los consolaré y los alegraré de su tristeza. Y llenaré
con abundancia el alma de los sacerdotes, y mi pueblo se saciará de mi bondad —declara el Señor".
(Jeremías 37: 7-14)
- Reconocemos a Jerusalén como la capital de Israel, debido al pacto eterno que hizo Dios con este pueblo.
El señor dice de Israel: “Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán
un solo pastor; andarán en mis ordenanzas y guardarán mis estatutos y los cumplirán.
'Y habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres;
en ella habitarán ellos y sus hijos, y los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo
David será su príncipe para siempre. 'Y haré con ellos un pacto de paz; será un
pacto eterno con ellos. Y los estableceré, los multiplicaré y pondré mi santuario en
medio de ellos para siempre. 'Mi morada estará también junto a ellos, y yo seré su
Dios y ellos serán mi pueblo. 'Y las naciones sabrán que yo, el SEÑOR, santifico
a Israel, cuando mi santuario esté en medio de ellos para siempre.'"
(Ezequiel 37:24-28 LBL)